¿Estamos cambiando nuestro estilo de vida?
Hoy en día, queda demostrado que, uno de los hechos fundamentales que ha propiciado el sedentarismo y la inactividad física ha sido el cambio en el estilo de vida. El hombre moderno se ha convertido en “hombre tecnológico” olvidándose así de su condición biológica siendo la actividad física el 5% de la energía ingerida por los alimentos frente al 80% que suponía tiempo atrás.

Los avances tecnológicos sufridos en la actualidad han contribuido a un mayor sedentarismo, que, junto a una inadecuada alimentación, estrés, tabaquismo, etc. Aumentan el riesgo de sufrir algún tipo de enfermedad cardiovascular, un aumento de la grasa visceral y una disminución de tu condición física. El término “Sedentarismo” describe distintos tipos de actividades que requieren un bajo nivel de gasto energético e incluye el estar sentado durante desplazamientos, lugar de trabajo, ocio, etc. Recientes estudios han demostrado que el sedentarismo es un factor de riesgo asociado a causas de mortalidad independientemente de la actividad física practicada (González-Gross, 2014).
Esto unido a que, actualmente, la inactividad física es el cuarto factor de riesgo de mortalidad más importante en el mundo (OMS), incrementando un 20% – 30% el riesgo de mortalidad de una persona y que parece estar asociada esta inactividad con el consumo frecuente de snacks y bebidas carbonatadas, quizá nos haga preguntarnos: ¿Tenemos unos buenos hábitos de vida saludables? ¿y si los cambiamos? ¿Cómo podemos cambiarlos y que profesional podría ayudarnos a conseguir nuestros objetivos?